Canal Caracol perdió pleito millonario por obrar de ‘mala fe’ contra uno de sus humoristas

Nuevamente las redes sociales destapan noticias que pasaron desapercibidas para los medios. A través de los muros de Facebook, muchos internautas se están enterando de un hecho en el que David le volvió a ganar a Goliath: el Canal Caracol perdió una demanda millonaria por obrar ‘de mala fe’ contra uno de sus más recordados comediantes.

El caso fue el siguiente: Jorge ‘el Topolino’ Zuloaga fue uno de los humoristas de ‘Sabados Felices’ más recordados y que más tiempo duró en el famoso programa de televisión. El picaresco hombre de muy corta estatura y ojos claros, empezó a trabajar en el show sabatino en 1977 con un contrato laboral en regla que le ofrecía los beneficios y las prestaciones de ley. A mediados de 1994 Caracol Televisión, con presiones y triquiñuelas, le metió gato por liebre al ‘Topolino’. Le cambió su contrato estable por uno de prestación de servicios que a las claras era muy desventajoso, pero Zuloaga aceptó por temor a perder su empleo.

En el 2001, el Canal Caracol no le renovó más el contrato al ‘Topolino’, quien al darse cuenta del perjuicio económico decidió demandar a la empresa. Así empezó una lucha legal de varios años que finalmente llegó a la Corte Suprema de Justicia, instancia jurídica que le puso punto final a la querella y declaró ganador al ‘Topolino’. Aunque el histórico fallo (que sienta un precedente muy importante para defender los derechos de quienes trabajan en los medios) fue emitido el año pasado, apenas ahora se conocen los detalles de la sentencia gracias a la difusión de la misma por medio de las redes sociales.

La sentencia de la corte SL3962-2014 señala claramente que el hoy Canal Caracol “actuó de mala fe; que respaldar esas actuaciones permite que empleadores inescrupulosos continúen con la vinculación con ese tipo de contratos”. La ponencia llamó las cosas por su nombre y dijo que a Jorge Zuloaga se le impuso un contrato leonino, sin ningún tipo de prestación distinta al pago de sus servicios artísticos.

En consecuencia, la Corte Suprema de Justicia condenó a Caracol y le obligó a pagar una suma superior a los 200 millones de pesos. Este caso, junto al del presentador Agmeth Escaf (quien ganó en primera instancia un caso de vulneración de derechos laborales), son un triunfo para quienes ponen su talento al servicio de los grandes medios.