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La destitución de la Señorita Honduras, Sirey Morán, generó un gran alboroto no sólo por el hecho de que la reina no participará en Miss Universo sino además por las aparentes violentas circunstancias de una pelea que llevaron a la decisión.
Según la reina destituida, en una discusión que ella tuvo con el dueño del reinado, Carlos Rivera en su casa de Nueva York el pasado 30 de junio, Sirey Morán recibió agresiones verbales y físicas por parte del empresario.
En un documento que la reina envió al diario El Heraldo de Hondura, ella afirmó que la discusión se generó por la negativa de Carlos Riviera a la asistencia de la Señorita Honduras a un evento de beneficencia.
Sirey Morán junto al empresario y dueño del concurso Señorita Honduras, Carlos Rivera
La reina expresó en el comunicado: “De conversación pasamos a discusión y luego a agresión verbal y golpes de parte del Sr. Carlos Rivera y Bryan Alexis que fue el primero en atacarme tratando de quitarme el celular y que seguidamente Carlos lo apoya agrediéndome física y verbalmente”.
Sirey Morán agregó que Carlos Rivera quería quitarle su teléfono al darse cuenta que ella había grabado la conversación y no quería pruebas de lo hablado. Luego ella tuvo que salir de la casa de Riviera a la calle, gritando y pidiendo ayuda a la policía.
Días antes la reina había dio sometida a una cirugía, razón por la cual ella afirma se sintió aún más en peligro y vulnerada en su dignidad.
La Señorita Honduras con la corona que le fue quitada.
El dueño del concurso justificó la destitución de la Señorita Honduras
Pero el dueño del concurso de belleza tiene una versión diferente de lo sucedido. Luego de la destitución, el empresario dio sus declaraciones al diario La Prensa asegurando que la discusión en su casa se inició cuando él le presentó el contrato a la reina para señalarle algunas fallas que ella estaba cometiendo, pero Sirey tomó la situación con mucha rabia.
El empresario dijo al diario: “Es cierto, yo le dije: ‘Sirey, no seas tan pendeja’ pero así nos tratamos ella y yo. Nunca la agredí físicamente. Esa es mi verdad…Ese audio ella lo alteró. Dijo que yo la había golpeado sólo por hacer la maldad. Ella editó las partes en que decía que si la destituíamos iba a hacer un escándalo”.
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Cuando le preguntaron a Riviera si la reina estaba oficialmente destituida, él respondió: “Sí, yo soy el dueño del concurso y si yo digo que no va, no va…”
¿Quién estará diciendo la verdad? Por lo pronto el concurso de Miss Universo tiene una candidata menos.
