Varios países del oriente, como India, Nepal y Bangladesh, celebraron ayer una festividad que causa la admiración del resto del mundo. Se trata del Festival de las Luces conocido como el Diwali, una festividad que también es conocida como el año nuevo hindú.
Como suele pasar en otras culturas, el año nuevo es una oportunidad para propiciar comienzos y renovar el alma. La gente estrena ropa, comparte comida y además ilumina la noche con fuegos artificiales, lámparas y mucho color.
Este año, la celebración atrajo las miradas del mundo por el espíritu que la motiva y las hermosas imágenes que fueron dadas a conocer por los fotógrafos que capturaron la esencia de la celebración.
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Un religioso Sikh, ataviado con un turbante enorme, representa el más profundo sentido espiritual del Festival de las Luces.

Imperdibles los fuegos artificiales. Los artistas de la pirotecnia despliegan en el Festival de las Luces lo mejor de su arte.

Durante el Diwali tienen mucha demanda estas vasijas llamadas diyas. Con un propósito ritual, se acostumbra poner varias de estas piezas por toda la casa.