La presión por lucir siempre bella y mermar el efecto del paso de los años, hizo que María Mónica Urbina, una de las reinas más queridas y recordadas por los colombianos, estuviera muy cerca de la muerte.
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La ex Señorita Colombia que impactó con su belleza guajira en el certamen de Miss Universo de 1986, habló acerca de varios difíciles episodios de su vida en el programa del Canal Caracol “Se dice de mí”, entre ellos que la grave infección que adquirió en sus piernas y cara luego de haberse sometido a un tratamiento estético en el 2008 que por poco le quita la vida.

La exreina comparte con sus seguidores en Instagram fotos como esta recordando la época de su reinado
Buscando hacer unos retoques y mejoras en su figura, María Mónica confió su cuerpo a una esteticista recomendada por unas de sus primas, y aunque antes de iniciar el tratamiento le aseguraron que le aplicarían un ácido rejuvenecedor, realmente le inyectaron un material de relleno que su cuerpo rechazó por la presencia de una bacteria. El resultado fue una severa infección que se agudizó en los múslos de la exreina, donde se formaron abscesos con mucha materia que aunque eran drenados a la semana volvían a crecer.
Fue una época de terrible angustia y muchas lágrimas la que vivió María Mónica Urbina, al verse con su piel infectada y su cara deforme. Para recuperarse, la exreina tuvo que someterse a un intenso tratamiento con antibióticos durante un año y a varias cirugías en el rostro para retirar el material nocivo y reconstruir sus labios deformados por la sustancia.
En una entrevista concedida para la revista JetSet en el 2011, María Mónica manifestó lo angustiante que fue para ella ver su piel y cara arruinadas lo que la llevó a pensar en sus propias palabras: “Estoy podrida, me estoy muriendo”.
Hoy en día a sus 48 años, María Mónica reconoce que la principal culpable de su tragedia fue ella misma, ya que empujada por la vanidad, no se informó lo suficiente y acudió a la persona equivocada aunque conocía a reales profesionales de la estética con los cuales no hubiera corrido riesgos.
Totalmente recuperada y feliz con su apariencia actual, María Mónica ahora se ve reflejada en su hermosa hija Manuela, con quien comparte constantemente fotos en las redes sociales.